martes, 17 de noviembre de 2015

"Tienes derecho a guardar silencio"

Esa sensación que se retuerce en tu interior, a la altura del estómago, pero más profundo que la carne. Te hace entrecerrar los ojos, torcer el gesto y a veces cerrar los puños con fuerza para no explotar de "a saber qué".
Y cuando por fin te abandona, lo que deja es un vacío.

viernes, 16 de octubre de 2015

Extracto.


"Y el tiempo que estuve solo, me encogía en mi lecho cada noche, echando de menos rodearla en un abrazo y cruzar juntos el velo del sueño.

Y cerraba mis ojos sabiendo que esa noche no me despertaría cien veces, una por cada vez que ella se moviera.

Y en la mañana los abría echando de menos su pregunta y mi mentira, al decirle que había dormido bien.

Pues cuando ella, nerviosa, o inquieta por sus oníricos pensamientos, o tal vez sólo buscando una postura más propicia, se movía entre las sábanas, a veces acercándose más a mí, a veces alejándose, acalorada, con la inocencia de la mente dormida, yo despertaba.

Despertaba y permanecía un tiempo observándola, aprovechando para contemplarla en ese estado de paz y calma que sólo el sueño nos da, y a veces ni eso.

Y cuando habíame complacido la vista, la besaba de nuevo.

Y sonriendo, acomodado a la nueva imagen de su cuerpo, volvía yo a mis sueños."

- André Parfois. Autobiografía.

miércoles, 3 de septiembre de 2014

Musas.

Se mueve como un retazo de papel agitado por el viento, como se agitan las suaves sedas de las musas al son de la brisa matinal de un día de primavera. Se me escapa suave entre los dedos y la observo alejarse conteniendo la respiración. La pierdo para siempre.


No.

Vuelve.

La atrapo y la retengo contra mí durante el tiempo justo para respirar su aroma, hasta que vuelve a deslizarse, escapando de mi abrazo para desaparecer. Durante una milésima de segundo en la que el tiempo se detiene, mi corazón queda en suspenso incapaz de recordar qué estaba haciendo hasta entonces. Una milésima eterna. La busco y la encuentro detrás de mí, con una sonrisa que me hace olvidar el pánico de instantes atrás. Todo vuelve a funcionar.

Ella corre y yo detrás, arrastrado por su encanto. No puedo dejar de mirarla mientras sonrío embelesado. Ni siquiera miro por dónde piso. Ella me guía y tira de mí cuando me quedo atrás, me lleva a algún lugar desconocido. No he querido preguntar. Seguro que es el paraíso.

Es voluble y enigmática. Incomprensible en su totalidad y gusta de torturarme con sus silencios, pero yo me dejo. Me dejo porque es voluble y enigmática, incomprensible en su totalidad y gusta de torturarme con sus silencios. Y eso me gusta.

sábado, 7 de diciembre de 2013

Oroi Nan

Siento una fuerza, un arrebato, un remolino de emociones rebulléndose, retorciéndose y enredándose con mis entrañas. Quizá raje mi estómago y aparezca ensangrentado y furioso, con trozos de mi interior todavía colgando de sus garras. Quizá se digne a fluir desde mis dedos con la forma de la música que trae consigo el primer amanecer de la primavera. Quizá salga de mis labios y suene como las palabras del primer amor, del peor odio, de la mayor frustración o de la más profunda pasión. Quizá se quede dentro, martirizándome con su revuelo, sacándome de quicio y llevándome al borde de la ansiedad.

Escribo para ver si se anima a salir, porque siento que algo grita dentro de mí y es muy frustrante no saber qué dice...

martes, 27 de agosto de 2013

Enajenación mental transitoria dependiente.

Y me pregunto...

Dónde estás, que no te veo
Ni te siento entre mis dedos.

Dónde estás para que enrede
Mis miradas en tu pelo,
Mis manos en tu cintura,
Mi razón en tu hermosura
Y mis labios en tu cuello...

Cuán singular desespero
Y tamaña desazón
Prendiendo ardiente fuego
A mi acorralada razón.

Cuán desaforado me veo...
Qué poco resta de mí...
Mi razón se hunde en un pozo
Que parece no tener fin.
¿Quedaré finalmente loco,
Si acaso logro vivir...?

Aunque así fuere te juro,
Con la razón en lo más oscuro,
Que volará sobre todo muro
El día que vuelvas a mí.

sábado, 15 de junio de 2013

No llegarás, no...

No llegará esta noche.
No llegará pues no ha de llegar.
Pero no llegará esta noche.

Desarropado, desabrigado,
abrazado al calor de la noche,
de todo otro despojado.

Triste, alegre y ambiguo,
anhelante de un cuerpo concreto y amigo,
anhelante de instintos antiguos.

Triste por la palpable ausencia.
Alegre por la felicidad que ella consigue
libre de su presencia.

Presencia amada con pasión,
Mas aún encadenante, dependiente.
Una presencia, a la sazón.

Y ella lo añorará al atraparla el sueño
Y él la añorará al atraparle la realidad
Pero han de tener su tiempo cada uno
Seguido se reunirán.

Hoy duermo solo. Y no solo duermo solo, sino que duermo con la certeza de dos días más de soledad. No sé qué es peor, si la soledad o la miserable compañía de la certeza de más soledad... El caso es que, pensando en ello, me ha apetecido escribir algo. No me sentía inspirado, así que me ha salido forzado, pero joder, me apetecía escribir, le gustara a la musa o no.

lunes, 20 de mayo de 2013

This is a thriller! (8)


El otro día, viendo la cartelera me encontré con que todas las películas eran un thriller. ¡Todas! Suena bien, ¿eh? Pues yo me dije: ¿y eso qué coño es? Y lo busqué en la Wikipedia (ya sabéis, esa web que almacena toda la sabiduría universal; que es, a su vez, toda la sabiduría del vecino friki de enfrente, que crea todas las páginas aunque se las tenga que inventar).

Bueno, pues gracias a mi vecino de enfrente entendí lo que era el género thriller. Hasta entonces yo había pensado que era un género que se habían inventado los directores de cine. Siempre los había imaginado intentando describir el género de su película:

"-No es de acción, porque no hay tiros ni explosiones suficientes. No es un drama, porque ni mi madre lloraría con ella. No es una comedia porque no tiene ni puta gracia. Tampoco es una crítica social porque no reivindica nada. Lo único que da miedo de la película es su presupuesto, así que tampoco es de terror. Y no es de amor, porque sexo hay, pero sólo por necesidad.

-Señor, yo creo que...

-¡Joder, Mike! no podemos simplemente decir que es una película de cine español... ¡Somos americanos, joder! ¡Cuando nuestro vocabulario se agota nos inventamos las palabras! Además, el protagonista no es un ignorante rabalero, ni folla con prostitutas, ni aparece su madre en la película vestida con una bata blanca y flores rojas.

-Entiendo señor, no tiene la esencia del cine español, pero ¿por qué no añadimos algunos misterios y decimos que es un thriller? [para los de la logse*, thriller: suspense, intriga, misterio…].

-Mike, me gusta esa idea. Si no fueras un hombre te haría sentir mujer aquí mismo. ¡Todos listos para grabar las escenas de misterio! Colocad esa cámara tras las cortinas. Poned otra tras una puerta entreabierta para la escena del pasillo. Quiero un enfoque desde detrás de la ventana para la escena del desnudo. Sí, Natalie, tendrás que quitarte la ropa de nuevo. ¡Que alguien traiga una bata para la señorita Portman! ¡¿Y dónde está mi jodido café?!"

Os hacéis una idea…

Así que tenemos que un thriller es una película con misterios. Y digo yo: todo misterio conlleva un riesgo, porque alguien querrá que el misterio siga siendo eso, un misterio. Y donde hay riesgo hay tiros. Si además de eso, sumamos: que no hay cine sin sexo; que en todos los argumentos hay algún problema con el gobierno; que el compañero del protagonista muere (y eso es triste); que nos descojonamos cuando la chica le da la patada en los huevos al malo; y que a todos nos da canguelo esa escena en la que la cámara enfoca desde detrás de una planta... Al final tenía yo razón…

No tenían ni puta idea de a qué género pertenecía y se lo inventaron.


*Goyo Jiménez Copyright ©