A veces me despierto y tengo miedo de no encontrar una razón para hacerlo. Me pregunto de qué sirve mi vida y, con la mayor de las hipocresías, acabo resolviendo que para nada. Pero aun así, me levanto, aunque solo sea porque existe la posibilidad de que pase algo interesante en el día. Por suerte, suele pasar, y eso me invita a probar de nuevo al día siguiente...
De todas formas esto es solo la mierda que me tocaba escribir, según mi guión... Pues soy un actor, aunque no estoy en un escenario ni los focos están apuntándome, así que supongo que solamente soy un mentiroso. Un amigo me dijo hace poco que no soy ningún genio loco, que sólo me gusta parecerlo. Y en cierto modo tiene razón. Pero la cuestión es... ¿Quién demonios soy? ¿El chico triste y pensativo que se tira en su cama mirando al techo y preguntándose por la razón de su propia existencia? ¿O el que sonríe sin motivo y vive la vida por la sencilla razón de vivirla? ¿Qué papel es el de verdad? Llevo tanto tiempo interpretando papeles para poder seguir adelante tras aquello que pasó, que no me acuerdo ya de quién es el de verdad, o siquiera si el personaje sigue en el repertorio...
Y ahora es cuando me doy cuenta de por qué pese a decidir cada día que no quiero estar con nadie, que solo me basto y que la felicidad está en cada uno, inconscientemente te sigo buscando... Lo hago porque necesito volver a los 18 años, cuando aprendí a controlar mis emociones. Cuando dejé de sentir las cosas para elegir sentirlas... Necesito encontrarte, porque confío en que seas capaz de generar en mí el sentimiento que me haga recordar cómo soy... Te necesito, y nunca jamás volveré a decirlo con tanta sinceridad...
Ya sabes lo que te he dicho...Hay que buscar las razones.
ResponderEliminarPero yo me pregunto si la razón está en otra persona. Antes creía que sí (quizás lo siga creyendo), no lo tengo muy claro...
La razón no tiene por qué ser una persona. También hay quienes viven para conseguir el éxito, quienes viven por sus amigos (para conseguir más) y quienes viven por mera inercia de respirar, comer y seguir viviendo.
ResponderEliminarEn mi caso, por una razón u otra, la razón de mi existencia siempre ha sido encontrar a esa otra persona. Antes, porque tenía en la cabeza el romanticismo de todas las novelas que leí y para mí el universo giraba en torno al amor. Ahora, tras los desengaños y bofetadas de la vida, porque creo que es la única forma de volver a ser quien fui...